martes, 11 de noviembre de 2014

LA GRAN GUERRA: FOTOGRAFÍAS, MÚSICA Y CUENTOS

Para los más aficionados a la Gran Guerra, aquí os dejo un buen puñado de imágenes:

Fotos de la Gran Guerra:
http://www.gwpda.org/photos/greatwar.htm
Visita virtual por el Imperial war Museum:
http://www.iwm.org.uk/
Por último le ponemos música a la Gran Guerra con la cortesía de Metallica, quienes crearon este tema basado en la película "Johnny cogió su fusil", donde se narra las desgracias de un joven combatiente de la Primera Guerra Mundial que se despierta confuso en un hospital, confinado de por vida, ciego, sordo y mudo y con las piernas y los brazos amputados a causa de una explosión sucedida durante un bombardeo. Al principio no es consciente de lo que ha sucedido y en qué condiciones está, pero poco a poco comienza a darse cuenta...



Y para terminar, nada mejor que una reflexión final sobre la guerra basado en un cuento anónimo:

" En un diálogo entre un soldado y un oficial, el primero le dice al segundo: -Mi amigo no ha regresado del campo de batalla, ¡señor solicito permiso para ir a buscarle y rescatarle!-, -¡permiso denegado-, replicó el oficial -no quiero que arriesgue su vida por un hombre que probablemente ya esté muerto-. El soldado hace caso omiso de la orden, sale y una hora más tarde regresa mortalmente herido transportando el cadáver de su amigo. El oficial cuando le ve estaba furioso, -¡ya se lo dije yo que está muerto!, ¡ahora perderé a dos hombres!, dígame: ¿merecía la pena arriesgarse para traer a un hombre ya muerto?-. El soldado moribundo le responde: - Claro que si, señor, cuando le encontré todavía estaba vivo y pudo decirme, "Jack, estaba seguro de que vendrías."-
Y es que en las guerras sacamos lo peor de cada uno de nosotros, como se dice en "La lista de Schindler", pero yo creo que también ocasionalmente sacamos lo mejor, lo más noble, lo más sublime, como el compañerismo, los gestos de heroísmo, la amistad, la solidaridad con el que tienes al lado, unidos por un destino común, porque todo el mundo quiere sentirse querido y apreciado, incluso en los momentos más extremos, en los momentos finales, cuando sabes que todo está perdido, incluida la vida, pero no los gestos de amor. Cuando un día ya no haya guerras, significará que habremos dado un paso adelante hacia la vida, porque mientras haya guerras, lo único que tenemos claro es que el ser humano sigue siendo un ser inhumano."
(Reflexión de Jesús Callejo Cabo en su programa radiofónico "La Escóbula de la Brújula")