miércoles, 18 de noviembre de 2015

FUNERAL VISIGODO EN EL AULA


Sin salir del aula, hemos tenido el honor de vivir una experiencia que nos ha trasladado a la Hispania Visigoda, concretamente al funeral de un guerrero, al que desde aquí rendimos homenaje.
Lo vivido ha tenido el objetivo de consolidar nuestro conocimiento sobre la realidad histórica de los 300 años de reino visigodo, con sus luces y sus sombras, además de comprender lo que supuso la conquista musulmana y la formación de los primeros reinos cristianos del norte.
Para ello, los alumnos de 2º ESO (13 años) a partir de la asignatura de Ciencias Sociales, Historia, y dentro del proyecto iniciado durante el curso de "El Ministerio del Tiempo", con el que nos desplazamos por el espacio-tiempo con nuestra imaginación, han sido testigos del fin de dicho reino.
Además, ha sido imprescindible la presencia del sonido de lo remoto de Neonymus, que a modo de chamán, nos ha sabido guiar a nuestra esencia más pura con su música, y sin él la puesta en escena y el sentir de esta experiencia no hubiese sido lo mismo. (http://www.neonymus.com/)
La conexión entre los visigodos y los nobles que se refugian en los Picos de Europa a la llegada de las tropas de Tariq, conformando el reino de Asturias de Don Pelayo, "nuestro guerrero caído", funde hechos legendarios con la ciencia histórica, sobretodo a la hora de abordar la famosa "Batalla de Covadonga" del 722, donde se dice fueron frenados los ejércitos musulmanes en su avance por el norte.
Es aquí donde el olfato crítico de los alumnos se pone a prueba, por lo que seguidamente hemos indagado en las crónicas musulmanas y cristianas para extraer nuestras propias conclusiones.
Las leyendas siempre esconden un hilo de Historia, están narradas con un lenguaje simbólico que se entendía en aquellos tiempos, aunque en este caso también observamos que las crónicas recogen la imparcialidad de quien las escribe.
Lo cierto es que nos ha emocionado comenzar la clase de esta manera, y nos ha motivado a indagar más en la Historia, con rigor y desde una perspectiva crítica, sin obviar el goce que supone escuchar viejas historias que configuran la idea de lo que somos hoy día.

Veamos las dos crónicas musulmanas a comparar:

TEXTO A
Recibió el valí Ambasa recibió, en efecto, el gobierno de España (…). Y se hizo dueño de Galicia, Álava y Pamplona, sin que quedase en Galicia alquería por conquistar, si se exceptúa la sierra, en la cual se había refugiado con 300 hombres un rey llamado Belay [Pelayo], a quien los musulmanes no cesaron de combatir y acosar hasta el extremo de que muchos de ellos murieron de hambre (…) hasta quedar reducidos a 30 hombres (…). Era difícil para los musulmanes llegar a ellos, y los dejaron diciendo: “Treinta hombres, ¿qué pueden importar?”

Crónica Musulmana del siglo XI

TEXTO B
Y ahora ya el dicho Alkama ordena que se inicie el combate (…). Pero en esto no faltaron las grandezas del Señor, pues una vez que las piedras habían salido de las catapultas y llegaban a la iglesia de Santa María Virgen, que está dentro, en la cueva, recaían sobre los que las lanzaban y hacían gran mortandad a los musulmanes. Y allí (…) se dio muerte a Alkama. Y en el mismo lugar fueron muertos 124000 de los musulmanes, y 63 000 que habían quedado subieron a la cima del monte Auseva, y por el lugar de Amuela bajaron a Liébana.
Cuando marchaban por lo alto del monte que está sobre la ribera del río Deva (…) ocurrió por sentencia de Dios que ese monte, revolviéndose desde sus fundamentos, lanzó al río a los 63 000 hombres, y allí los sepultó (…)
Crónica cristiana de Alfonso III, siglo IX