Los Estados Generales dieron voz a los tres estamentos de la sociedad, la cuestión era aprobar el pago de impuestos de los privilegiados ante la crisis económica que se vivía, y el voto por cabeza, ya que siempre se votaba por estamentos, con lo que nobleza y el clero eran dos contra uno. ¡Estaba en juego la Soberanía Nacional!
La Nobleza, (representada por el conde de Gutierrez, la marquesa Carmen de Lozano, Sir Jesús, el duque de Chamartín Enrique de la estirpe de los "Navarro", Pablo de Borbón y Dos Sicilias) concluyeron: “nunca consentiremos que se extingan los derechos que han caracterizado hasta hoy a los privilegiados y que hemos recibido de nuestros ilustrísimos antepasados (...)". Además recomiendan a los diputados oponerse a todo lo que pueda atentar contra sus propiedades. La cosa se iba calentando.....
Especialmente exaltado se presentó el clero, de la mano de los Obispos implacables monseñor de los Dolores y su monaguilla Laura, junto con el cardenal Jose Antonio Riquelme, quienes amenazaron en reiteradas ocasiones a los burgueses, recordándoles su deber de pagar los diezmos y su condición de No Privilegiados. No estaban dispuestos a pagar impuestos y a cambiar el orden que había caracterizado a la sociedad durante tantos siglos.
Primera petición: Que los representantes del Tercer Estado no sean elegidos más que por ciudadanos que pertenecen verdaderamente al Tercer Estado...
Segunda petición: Que sus diputados sean iguales en número a los dos de los dos órdenes privilegiados... .
Tercera petición: Que los Estados Generales voten no por estamento, sino por cabezas...
En este estado de cosas, los ánimos caldeados, el reino arruinado que necesita ingresos, Maria Antonieta llamando al rey desde la peluquería..., la diputada sentencia:
"¿Qué le queda por hacer al Tercer Estado si quiere verse en posesión de sus derechos políticos de una manera útil a la nación?...
"El Tercer Estado debe reunirse aparte, no asistirá con la nobleza y el clero."Al grito de ¡Muerte al Rey! y de ¡Sólo nosotros representamos a la Nación!, el Tercer Estado sale por la puerta y se marcha al frontón (era la hora del recreo y lo hicísteis con ganas), donde se encierran y se autoproclaman Asamblea Nacional Constituyente, jurando no salir de allí hasta elaborar una Constitución, la revolución estaba en marcha.
Finalmente, el rey asustado por la toma de la Bastilla y temiendo por su cabeza acepta y firma la Constitución, que recoge los siguientes puntos:
- Abolición de los privilegios señoriales.
- Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano (... ¿y los de la mujer, dónde están?)
- Desamortización de los bienes Eclesiásticos (lo siento por Victor Manuel y su monaguillo).
- Soberanía Nacional y División de Poderes.
La revolución ha triunfado, de momento habrá rey, pero con un poder muy limitado por la Constitución, ya veremos que pasará despues, que por lo que cuentan pretende escaparse a Austria a pedir ayuda y traicionarnos.
"¡Que lo intente!, la guillotina está afilada...", según declaraciones en exclusiva para este periódico de los diputados jacobinos, quienes afilan la cuchilla de la guillotina entre risas.
GRACIAS POR PARTICIPAR,
LIBERTAD, IGUALDAD Y FRATERNIDAD PARA TODOS.
Pero que maravilla!! Felicitaciones a todos. Tomo nota para el próximo curso.
ResponderEliminarque kaña de profe! os lo cambio por el mio que solo lee y lee y me aburro mucho, saludos revolucionarios D=
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